[ESPAÑOL ABAJO]

Even before the deadly Coronavirus pandemic healthcare was a big issue. But even then, the real question was, why are so many people so sick in the first place? The answer, of course, is capitalism, which makes workers sick in so many ways.

Under communism people will be much less sick, much less often. I believe this will be true of all kinds of illnesses. It doesn’t take a lot of medical knowledge to see this.

For a start, life under capitalism is extremely stressful for workers. Workers never have enough money, even when they have a job. They have to worry about paying the rent or mortgage, buying food, paying for gas, buying clothes for the kids … you know the story.

It is well understood that stress aggravates almost all illnesses, from diabetes to depression. 

Reducing stress will, after struggle, all but eliminate the harmful addictions that workers contract trying to compensate. No (street) drugs, or smoking, or alcoholism, or eating disorders.

Work itself will become joyful, because we will be working together to satisfy peoples’ needs. Workers will do a variety of activities, even in the same day. No one will wear out body parts doing the same motions day after day.

Learning also will be joy, and will be mixed with working. Students will not spend long hours sitting motionless cooped up in a classroom. They’ll learn by doing.

People will not be lonely anymore. Almost all activities will be communal. Loneliness is known to be a health risk factor – as harmful as smoking or obesity.

Good food is vital to good health. We can make sure we eat well (if simply) and nutrition-based diseases like diabetes will all but disappear.

Under communism, even the air we breathe will be healthier. We’ll eliminate all the poisons that choke us every day. We’ll do this mainly by vastly reducing the use of fossil fuels and all but eliminating the private automobile that is a major source of this pollution. Workers will travel for the most part in clean, safe, public transportation – buses and trains. And the switch to public transportation will eliminate most traffic accidents.

People will also walk more, or ride bicycles. Physical activity, including participatory sports, will be a priority. 

Good housing, including sewage and clean drinking water, is also vital. We’ll do away with both junk food and junk housing, not to make money but to make workers happier. And a lot healthier.

Life under communism, once capitalism is gone for good, will above all be peaceful. No more nations and no more bloody wars. And without private property, no more crime

Of course there will still be healthcare under communism. And it will be be great for those who need it.
But with wage slavery abolished, life will be based on cooperation rather than health destroying competition.

I predict that, thanks to the communist lifestyle, workers won’t experience illness on the scale they do under capitalism.

[TRADUCCIÓN PROVISIONAL]

Incluso antes de la mortal pandemia del coronavirus, la atención sanitaria era un gran problema. Pero incluso entonces, la verdadera pregunta era, ¿por qué hay tanta gente tan enferma en primer lugar? La respuesta, por supuesto, es el capitalismo, que enferma a los trabajadores de muchas maneras

En el comunismo la gente estará mucho menos enferma, con mucha menos frecuencia. Creo que esto será cierto para todo tipo de enfermedades. No hace falta tener muchos conocimientos médicos para verlo.

Para empezar, la vida bajo el capitalismo es extremadamente estresante para los trabajadores. Los trabajadores nunca tienen suficiente dinero, incluso cuando tienen un trabajo. Tienen que preocuparse por pagar el alquiler o la hipoteca, comprar comida, pagar la gasolina, comprar ropa para los niños… ya sabes la historia.

Es bien sabido que el estrés agrava casi todas las enfermedades, desde la diabetes hasta la depresión.

Reducir el estrés eliminará, tras una lucha, las adicciones perjudiciales que contraen los trabajadores al tratar de compensar. No habrá drogas (ni callejeras), ni tabaquismo, ni alcoholismo, ni trastornos alimentarios.

El trabajo en sí mismo se volverá alegre, porque trabajaremos juntos para satisfacer las necesidades de las personas. Los trabajadores realizarán diversas actividades, incluso en el mismo día. Nadie desgastará partes del cuerpo haciendo los mismos movimientos día tras día.

El aprendizaje también será una alegría, y se mezclará con el trabajo. Los estudiantes no pasarán largas horas sentados inmóviles encerrados en un aula. Aprenderán haciendo.

La gente ya no se sentirá sola. Casi todas las actividades serán comunitarias. Se sabe que la soledad es un factor de riesgo para la salud, tan perjudicial como el tabaquismo o la obesidad.

La buena alimentación es vital para la buena salud. Podemos asegurarnos de comer bien (aunque sea de forma sencilla) y las enfermedades relacionadas con la nutrición, como la diabetes, desaparecerán casi por completo.

En el comunismo, incluso el aire que respiramos será más saludable. Eliminaremos todos los venenos que nos asfixian cada día. Lo haremos principalmente reduciendo enormemente el uso de combustibles fósiles y eliminando casi por completo el automóvil privado, que es una fuente importante de esta contaminación. Los trabajadores viajarán en su mayor parte en transporte público limpio y seguro: autobuses y trenes. Y el cambio al transporte público eliminará la mayoría de los accidentes de tráfico.

La gente también caminará más o irá en bicicleta. La actividad física, incluidos los deportes participativos, será una prioridad.

Una buena vivienda, con alcantarillado y agua potable, también es vital. Eliminaremos tanto la comida basura como las viviendas basura, no para ganar dinero, sino para que los trabajadores sean más felices. Y mucho más sanos.

La vida en el comunismo, una vez que el capitalismo haya desaparecido para siempre, será sobre todo pacífica. No habrá más naciones ni más guerras sangrientas. Y sin propiedad privada, no habrá más delincuencia.

Por supuesto, seguirá habiendo asistencia sanitaria en el comunismo. Y será estupenda para quienes la necesiten. Pero con la abolición de la esclavitud asalariada, la vida se basará en la cooperación en lugar de en la competencia que destruye la salud.

Predigo que, gracias al estilo de vida comunista, los trabajadores no experimentarán enfermedades en la misma medida que bajo el capitalismo.